La ULL entrega al Gobierno de Canarias la tercera fase del Catálogo de Vestigios Franquistas, con 428 elementos censados

La Universidad de La Laguna (ULL) ha entregado este martes al Gobierno de Canarias a tercera fase del Catálogo de Vestigios Franquistas, que cuenta con 428 elementos censados.
Esta tercera y última entrega se compone de un total de 9.300 páginas, y es relativa a las restantes islas del archipiélago, después de que la segunda se compusiera de las capitales de cada isla (y que está guardada en un cajón por parte del Gobierno de CC-PP) y la primera del municipio de Santa Cruz de Tenerife.
Cabe recordar que el Catálogo de Vestigios de Canarias se encuentra suspendido por el actual Ejcutivo de CC-PP, que aseguró que este año estarían listos los vestigios de todas las Islas y se publicaría entero en el BOC.
La ULL informa de que los vestigios abarcan denominaciones de espacios públicos, esculturas, objetos, inscripciones, lápidas, escudos y honores y distinciones alusivas a la época de la dictadura. El trabajo ha estado liderado por la catedrática de Historia del Arte Isabel Navarro Segura y por el profesor titular Jesús Pérez Morera, junto a los investigadores Yanira Hermida Martín y Kumar Kishinchand López y la colaboración de Yolanda Peralta Sierra y Ricardo Guerra Palmero.
El equipo investigador de la Universidad de La Laguna ha hecho referencia a la ardua labor de búsqueda de información en los archivos municipales, muchos de los cuales no están aún digitalizados, y la escasa proactividad encontrada en algunas localidades.
Se ha entregado pues a finales de marzo, en tiempo y forma, esta última fase del proyecto, que debería completarse con acciones de difusión, tal y como se indica en el convenio suscrito con el centro académico, para que su contenido sea conocido y valorado en todos los niveles educativos del archipiélago. La propia catedrática señala que se ha evidenciado un profundo desconocimiento de la historia de España más reciente y la tendencia cada vez más acuciada de los colectivos jóvenes a conectar con alianzas de extrema derecha.
La investogadora relata que tras la firma del convenio en 2022, y estando en elaboración la primera fase, entró en vigor la Ley de Memoria Democrática, que ha supuesto, explica la catedrática, una necesaria actualización para garantizar la ineludible armonización de las acciones institucionales sobre memoria histórica en el contexto nacional y de las comunidades autónomas, dada la disparidad de acciones.
La propia ley en vigor señala que pretende “preservar y mantener la memoria de las víctimas de la Guerra y la dictadura franquista, a través del conocimiento de la verdad, como un derecho de las víctimas, el establecimiento de la justicia y fomento de la reparación y el establecimiento de un deber de memoria de los poderes públicos, para evitar la repetición de cualquier forma de violencia política o totalitarismo”.
La ULL recuerda que el «Catálogo de símbolos y elementos contrarios a la memoria democrática» es el procedimiento definido en la legislación vigente, que contempla un registro de vestigios del Estado, en colaboración con las comunidades autónomas a través de un proceso de integración de los procedimientos seguidos en los distintos territorios del país. Además del catálogo, la propia ley señala la oportunidad de crear un centro virtual documental de la memoria histórica en Canarias, elaborar contenidos curriculares para su inclusión en el educación primaria, secundaria y bachillerato y la preparación de contenidos para las titulaciones universitarias, todo lo cual quedaría por abordar.
El documento actual se ha establecido conforme a esa Ley, y su metodología ha sido sometida a aprobación del órgano definido en la norma, la Comisión Técnica de Memoria Histórica, que, tras la presentación del documento correspondiente a la primera fase -municipio de Santa Cruz de Tenerife-, fue aprobado definitivamente en noviembre de 2022.
El rector señaló en el acto de recepción que es un orgullo para la Universidad de La Laguna la finalización de este vasto trabajo de investigación, calificándolo como una “magnífica forma de transferir a la sociedad el conocimiento que atesoramos”. También valoró que el catálogo fortalece la memoria histórica, “para no olvidarnos nunca de lo que pasó”, al tiempo de ser una poderosa herramienta para la ciudadanía que no ha tenido acceso directo al conocimiento de esos hechos tan relevantes en la historia reciente de nuestro país.
0